El próximo viernes 27 de de junio arranca en Villamalea la quinta edición del Festival Paisaje, una propuesta cultural cuyo eje central es la danza, pero que va más allá de la misma, entrando en simbiosis con la cultura y la idiosincrasia locales. Su organizador, Joaquín Collado, villamalense afincado en Barcelona, es bien conocido en los circuitos de danza contemporánea profesionales: prueba de ello es el reciente reconocimiento a mejor espectáculo en solitario en Cataluña por Hacia un sol negro, galardón que también recibió en 2022. Joaquín ha pisado escenarios en Francia, Estados Unidos, Bélgica o China para, en última instancia, retornar a su localidad natal y traer, de forma totalmente altruista y gratuita, el primer festival de danza contemporánea de un circuito castellano-manchego, hasta ahora, inexistente.
Pero la oferta de Paisaje supera la danza, pues busca, como su nombre indica, configurar un paisaje singular más allá de lo geográfico. Joaquín nos cuenta que, del mismo modo que no se le pueden poner puertas al campo, la frontera entre espectador y artista ha de ser difusa, por lo que la participación e integración del público es fundamental en el festival. Es por ello que una de las cosas que se promueven es la movilidad de los espectadores, no sólo en el pueblo, sino mediante la celebración de los distintos pases en diferentes ubicaciones que van desde la cooperativa del vino hasta el patio de la casa de la Nieves, la abuela del propio Joaquín.
Paisaje cuestiona la cultura de la espectacularidad, democratiza la danza y se yergue contra el elitismo en el arte. A través de distintos talleres dirigidos a todas las edades, nos anima a experimentar la danza y a reconciliarnos con nuestros cuerpos, viviéndolos más allá de la mera herramienta de trabajo u objeto sexual.
Paisaje es irreverencia, es libertad y desobediencia a los parámetros establecidos, por ello no apuesta por un único género de danza, a pesar de que el eje primigenio sea la poco conocida danza contemporánea. En la pasada edición, por ejemplo, pudimos realizar un viaje desde el tradicional tablao flamenco hacia el flamenco más «emborronao» y desdibujado en el que unas conchas hacían el papel de castañuelas. Existe, por lo tanto, una dramaturgia planeada entre los espectáculos, una continuidad que también vimos en Paisajes anteriores cuando pasamos de disfrutar de la pareja tercera clasificada en el mundo en baile de salón a la jota deconstruida y su historia política como método de control y disciplina de los cuerpos.
La programación del festival es riquísima y su planteamiento tan innovador que ya ha sido reconocido internacionalmente por la plataforma europea Aerowaves Dance across Europe, una red de 34 países, conformada por 46 festivales, teatros e instituciones de danza, dedicada a la conexión, apoyo y promoción de artistas y gestores culturales. Festival Paisaje ha sido seleccionado para participar en Aerowaves 2025, además de encontrarse entre los 3 premiados con una beca.
Desde la organización nos invitan a participar y a construir Paisaje, seamos conocedores o no del mundo de la danza. Nos animan a vivir los espectáculos y a hacer un ejercicio de reflexión y autoconocimiento en los talleres. Además, el sábado, la cantante conquense Bewis de la Rosa amenizará la ya tradicional fiesta de clausura, donde la filosofía del festival alcanza su colofón. Sin duda, una oportunidad única que no podéis perderos. Todo eelo, bajo el lema «Me bailo encima!»
Podéis seguir a Festival Paisaje en la cuenta de instagram: festivalpaisaje.